Desarrollo:
Se pone el grupo en círculo y uno comienza dando una palmada en un sentido o en el otro (izquierda o derecha), de modo que su compañero de al lado debe dar otra palmada y pasársela al siguiente.
Objetivo de la actividad:
Trabajar la atención y los reflejos.
Posibles variantes:
Para aumentar la dificultad de esta actividad hay que tener en cuenta la edad de los alumnos, puesto que en el caso de que fueran alumnos de 3 ó 4 años debe ser sencilla para que puedan seguir el ritmo y no se pierdan. Para niños un poco más mayores podemos incluir variantes como por ejemplo añadir pisotones además de palmadas, dobles pisotones o dobles palmadas para cambiar el sentido, agacharse o saltar para pasar el turno al siguiente compañero (a modo de silencio), etc. En el caso de niños más pequeños una variante que sí podríamos practicar es decir el nombre de uno de ellos para que éste de la palmada y después diga el nombre de otro de sus compañeros para que siga con el turno, ya que es una buena manera para que además de que permanezcan más atentos, se relacionen con los demás.
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